Por Tamara Homel*
Las he visto día tras día pararse en la Alameda con Las Rejas.
No se han detenido ni un solo día desde el 18 de Octubre golpeando ollas , rejas…Se han organizado día a día y parten puntuales al lugar con pancartas,con las fotografías de los asesinados por el Gobierno de Piñera.
Las he visto con firmeza junto a más vecinas y vecinos se han ganado el respeto y el cariño de transeúntes y de los conductores que pasan tocando las bocinas de sus vehículos,haciéndoles saber que esta lucha es justa, necesaria y saludándolas al pasar su consecuencia y permanencia en las calles.
Ellas y ellos, porque han sumado a los jóvenes del barrio a manifestarse desde el primer día a exigir dignidad para el pueblo. Juntos han celebrado Cabildos y hasta una hermosa Jornada Constituyente con artistas, músicos y los vecinos y vecinas se unen a ellas y a ellos alternadamente cada día, les he preguntado a todas que les hace permanecer activas y constantes. Responden todas porque no permitiremos que los crímenes y tantos jóvenes heridos y por los que han perdido sus ojos queden impunes.
En el barrio ya las conocen como las madres de Octubre porque han señalado aunque las víctimas no son sus hijos,solidarizan con las madres de las víctimas y sus familias.
Ellas salen día a día para que ninguna madre se sienta sola en esta lucha.
Son realmente increíbles y debe ser porque un pueblo organizado da esa seguridad.
Dicen estar en la primera línea , todas las noches son reprimidas, pero con los muchachos levantan barricadas de alerta y de demanda.
Me han dicho no bajarán los brazos hasta que la dignidad se haga costumbre y los muchachos del barrio demuestran su valor y su dignidad noche a noche.
Su lucha es el reflejo de un pueblo que no ha aceptado los acuerdos tránsfugas de quienes han ocasionado tanta desigualdad.Dicen no aceptamos una paz sin justicia social.
Suelen ellas “Las Madres de Octubre” esperar a los muchachos que vuelven hacia el poniente caminando después de actividades en la Plaza de la Dignidad,donde se hace un alto para saludarse y decirse que no hay esfuerzo estéril cuando se lucha por la dignidad del pueblo.
Han recreado cánticos,crean pancartas, han impedido detenciones, han quitado de las manos objetos incendiarios a carabineros cuando intentaban quemar negocios del sector para culparlas, les han quemado las manos,tienen amigos y amigas que pasan y les llevan refrescos.
Estas mujeres son tremendas, valientes y no pararán!
Las madres de Octubre levantaron con la ayuda de los jóvenes su propio homenaje a las víctimas transformando un rancio monumento en otro que reclama justicia.
Siguen cada día quizá con la idea de ver un día toda la Alameda llena por donde pase el pueblo libre.
Allá en el pequeño espacio de libertad,de denuncia, de exigencia de justicia se respira dignidad y aunque todas las noches son dispersadas por las lacrimógenas ellas y ellos ya tienen el cuero curtido y no bajarán los brazos allá donde se hace frente en Las Rejas a la represión y al mal gobierno.
Mi profundo reconocimiento y respeto a estas mujeres y a las y los jóvenes, son ejemplo de resistencia y dignidad.
Si usted pasa por ahí no olvide tocar su bocina y saludarles.
Se merecen eso y mucho más.
*Tamara es profesora, feminista y comunista, parte del Círculo de Acción Feminista Akelarre
Maravillosas madres, maravilloso artículo. Llegan, y llega, al alma.