En Paraguay, los números duelen: según el Ministerio Público, entre enero y mayo de 2025, se registraron 1.305 denuncias de abuso sexual contra niñas y niños. Lo que más expone a las infancias no es solo la violencia, sino el silencio. Ante esta realidad, la Asociación Familias por la Educación Integral en Paraguay (FEIPAR), decidió organizarse y producir una herramienta concreta: materiales de educación en sexualidad para las infancias de 6 a 12 años.
Bajo el título “Descubro y Aprendo: Mi cuerpo, mis emociones y el mundo que me rodea”, presentaron guías docentes y cuadernillos para estudiantes desde 1º hasta 6º grado. Se trata de una apuesta política y pedagógica que coloca a la infancia en el centro, con un mensaje claro: educar es cuidar. La sexualidad no se reduce al tabú del coito, como explica Adriana Closs, vicepresidenta de FEIPAR, organización integrada por madres, padres, abuelas y tías: “Educar en sexualidad es enseñar a decir NO, a reconocer abusos, a poner límites y a pedir ayuda. Lo que protege es la información clara y apropiada para cada edad”.
Los ocho materiales gratuitos, elaborados conjuntamente por especialistas en pedagogía, psicología, sexología y medicina, incluyen actividades prácticas para el aula y el hogar sobre autoconocimiento, gestión emocional, prevención de violencias y uso seguro de la tecnología. “Estos materiales son la respuesta de las familias ante un Estado que muchas veces falla en proteger a las infancias. No aceptamos más que la violencia sexual siga marcando la vida de nuestras hijas e hijos”, afirmó Alejandro Bonzi, integrante de FEIPAR.
Para Silvia Rolón, presidenta de la asociación, el lanzamiento refleja algo más profundo: la potencia de la organización comunitaria. “Cuando las familias nos juntamos, somos capaces de construir respuestas colectivas frente a las violencias. Nadie nos puede callar”, señaló.
Los materiales están disponibles de manera gratuita en el sitio web de la organización www.feipar.org/educar.